Cuando te dije gracias por segunda vez,
No era por invitarme un café.
Más allá de que también me comí una media luna de jamón y
queso
Y amo las medias lunas con jamón y queso, y antes odiaba el
jamón, 
Y sobre todo porque me dejes que no me la termine y, aunque
expones mi tda, lo naturalizas hasta hacerme querer comer ese último pedazo de
queso.
Pero igual tampoco tiene que ver con la medialuna,
Es porque siempre sos
Siempre estas
Hace millones de años.
Porque no me juzgas, o si pero en silencio.
Y, mientras estoy comiendo, cosa de que no pueda responder,
me deslizas que te parece muy pelotudo de mi parte tal o cual cosa.
Te quiero.
Porque sos de verdad y en vos puedo depositar emociones,
tristezas, felicidades… hace años. 
Gracias,
No solo por el café. Pero también y re contra sí por el café
y la media luna. 
