Un viaje de Sol a Ción.

Ción; el lugar donde todo se yuxtapone
con el Alma.

miércoles, 21 de febrero de 2018

LA CASA DE LOS JARDINES COLGANTES.

"La casa de los jardines colgantes"; así le decían en mi pueblo a la casa de mi abuelo. En realidad, no tenía ningún jardín colgante pero recuerdo que, allá por mi infancia, cuna y, a la vez, dueña de gran imaginación, solía describirle a mis amistades que mi nono tenía en su jardín una serie de islas voladoras, o más bien flotantes, repletas de las flores más hermosas y de sabor más exquisito que había visto y probado, lo cual, por supuesto, también era mentira. Tanto amor tenía ese jardín, que las novias y quinceañeras del pueblo iban a fotografiarse en su escalera de piedra, rodeada de rosas, calas, cactus y todos sus primos.

-" Mamá, yo quiero hacer una casa así", le decía a mí madre de pequeña. Nos albergaba cada sábado a los ocho primos que éramos en un quincho muy amplio, donde siempre se reunía gran cantidad de gente con la excusa de comer. Tenía unos ventanales extensos, gigantes en mi memoria, que abrían visuales a este jardín de rosas. Jugábamos al barco pirata en sus árboles y a la guerrilla en sus desniveles y terrazas.
Su sótano era el lugar de los tesoros (donde mi abuelo escondía el chocolate) y, en el tercer nivel, en una biblioteca de acceso escondido, completamente vidriada y permeable al exterior, estaba la proa: aquí abundaban los discos, fotos y diapositivas. Me pasaba horas en esa guarida, imaginando posibles escenarios y siendo testigo del paso de las estaciones en el cuadro más real que vi en mi vida.En verano, combatíamos en el exterior contra los "invasores" y, en invierno, nos escabullimos por sus "pasadizos" para aniquilar a los topos.
Sea como fuere, los sábados siempre terminaban con una visita al pequeño invernadero de mi abuela, alimentando a las tortugas que, el próximo fin de semana, serían nuestros ministros protectores.
Ni el tiempo, ni la ausencia de mis abuelos pudo borrar su magia: aún hoy, cuando pasó por en frente, veo sus jardines voladores, piratas en la costa, y a mi familia reunida. -" Yo quiero hacer una casa así, mamá... así de plural." ( DSAC para EPS - fadu 2017)